Imagina un dormitorio infantil lleno de encanto, con suaves tonos verdes pastel en los muebles que crean un ambiente tranquilo. El suelo de madera añade calidez, mientras que los pufs y los muñecos, estratégicamente colocados, infunden el espacio con ternura y fantasía. Un refugio ideal para el descanso y la imaginación de los más pequeños.